Si hay una técnica que realizamos todas las clínicas dentales en Ensanche de Vallecas de forma habitual y sencilla de realizar ese es el empaste. Y es que, aunque los métodos odontológicos han experimentado muchos cambios en las últimas décadas avanzando en materiales y técnicas para ofrecer mejores resultados, el empaste no pasa de moda.
Aunque el término más correcto para referirse en la Clínica Dental Gil Nieto es obturar, todo el mundo lo conoce como empaste dental y consiste en la reparación de un diente cariado, mediante la limpieza de la cavidad, eliminando los restos de caries, para proceder después al relleno del hueco con un material especial. Las ventajas de este tratamiento es que es rápido y en apenas unas horas, el niño puede volver a hacer vida normal y comer sin problema alguno.
La técnica del empaste no ha variado sustancialmente, aunque sí el material con el que se rellena el diente. Tradicionalmente se ha usado la amalgama dental, formado fundamentalmente de plata y mercurio, pero actualmente está en desuso dentro de las clínicas dentales en Ensanche de Vallecas en detrimento de los composites, que son derivados de resinas plásticas reforzados con vidrio o cuarzo y que están disponibles en varios tonos para que sean lo más parecido al diente, un punto fuerte en el aspecto estético.
El empaste, por ende, tiene una doble funcionalidad. Por un lado, recuperar la salud y función del diente, pero también estética, al eliminar los restos cariados. Eso sí, el empaste es una solución eficaz, pero al mismo tiempo no permanente en el caso de no mantener una correcta higiene bucodental. Y es que, al contrario de lo que mucha gente piensa, un diente empastado no significa que no se pueda volver a sufrir de caries en ese diente.